SISTEMAS DE HEMATOLOGÍA DE 3 PARTES FRENTE A SISTEMAS DE 5 PARTES
El hemograma completo suele ser la primera prueba que solicita un médico para evaluar el estado de salud general de un paciente. Para estas pruebas, se utilizan con frecuencia análisis hematológicos automatizados. Además de determinar los niveles de plaquetas, glóbulos rojos y glóbulos blancos, la mayoría de los analizadores también pueden diferenciar los leucocitos en 3 (LYM, MID, GRAN) o 5 subpoblaciones (LYM, MONO, NEU, EOS, BASO).
Aunque un analizador hematológico denominado de 3 partes proporciona información suficiente para la mayoría de los entornos clínicos, las tendencias muestran un mayor interés en los instrumentos de 5 partes. Si bien los analizadores de 5 partes pueden ofrecer información más detallada sobre los glóbulos blancos, los instrumentos de 3 partes pueden ofrecer grandes beneficios en términos de costo.
ENTORNOS CLÍNICOS EN LOS QUE LOS DIFERENCIALES DE 3 PARTES Y DE 5 PARTES PUEDEN OFRECER DIFERENTES VENTAJAS
Aunque cada tipo de hemograma completo proporciona información que ayuda a diagnosticar afecciones relacionadas con la sangre, un instrumento de 3 partes proporcionará información suficiente para el laboratorio de consultorio médico típico. Con un hemograma completo simple, los recuentos de neutrófilos y linfocitos responderán a la pregunta de si existe una infección viral o bacteriana que se pueda tratar con antibióticos.
Sin embargo, para los laboratorios especializados, un instrumento de 5 partes puede proporcionar una evaluación más detallada y específica del estado del paciente. Para distinguir los eosinófilos y basófilos de los neutrófilos, por ejemplo, es obligatoria una diferenciación de 5 partes.
Dependiendo de los criterios locales, las muestras que se marcan como anormales suelen requerir un examen microscópico para confirmar los resultados obtenidos con el analizador, independientemente del tipo de instrumento. Para esto, los frotis de sangre suelen enviarse a un laboratorio de hematología para un recuento manual.
Según muchos laboratorios de hematología con experiencia en exámenes de frotis de sangre, la cantidad de muestras que requieren un examen manual se puede reducir en gran medida con la información más detallada sobre el estado de la sangre proporcionada por un diferencial de 5 partes.
Si aproximadamente el 30% del número total de muestras genera una alerta sospechosa con un instrumento de 3 partes y, por lo tanto, requerirá un examen manual, la información más detallada proporcionada por un instrumento de 5 partes puede reducir este número a aproximadamente el 20%, lo que en última instancia disminuye el tiempo de laboratorio y el costo de envío de las muestras.
Sin embargo, cuando la prueba es normal y el reembolso es el mismo independientemente del diferencial de 3 y 5 partes, un instrumento de 3 partes puede contribuir a una mejor economía del laboratorio al ofrecer al usuario una mayor oportunidad de ganancias. Además, un instrumento de 3 partes basado en una tecnología de impedancia puede requerir menos mantenimiento que un instrumento de 5 partes, que también incluye una tecnología de medición basada en láser más sensible.
AUTOR: Daniel E. Ramírez Asmat
